Es tiempo de preguntarnos porque no le damos la misma importancia a nuestra salud mental y emocional, que le damos a nuestra salud física. Mientras muchas de las razones por las cuales la comunidad latina casi no visitamos proveedores de salud mental son culturales, también hay otras cuestiones que considerar.
Un artículo de NAMI, la Alianza Nacional de Enfermedad Mental, explica algunas de estas cuestiones. Incluyen la falta de información y entendimiento de los desordenes mentales, preocupaciones de privacidad, barreras de lenguaje, el no tener aseguranza, el estado legal, entre otras cosas más.
Muchos de estos estigmas y falta de entendimiento de la salud mental tratan con ideas que tenemos sobre la fortaleza. Muchas veces nos convencemos que “tenemos que ser fuertes.” Pero podemos ser fuertes y también buscar ayuda. Hay que normalizar la idea de que la ayuda no nos hace débiles, en cambio nos fortalece. Especialmente cuando esta ayuda viene de gente que tiene entrenamiento y conocimiento de cómo ayudarnos mejor.
Otras ideas también incluyen, “No necesito visitar un psicólogo porque no estoy loco.” El visitar un profesional de salud mental no siempre significa que tenga alguna enfermedad psicológica, cual quiera puede ir ya que todos aveces simplemente necesitamos alguien que nos escuche o nos ayude a superar un momento difícil en nuestra vida.
Si usted piensa que tiene alguna enfermedad mental, esto no es nada de lo cual debe estar avergonzado. “Cada año, aproximadamente 42.5 millones de adultos Americanos, sufren de alguna enfermedad mental,” según la Administración de Abuso de Sustancias y Servicios de Salud Mental (SAMHSA, por sus siglas en ingles).
Esto significa que usted no está solo, y hay muchos profesionales que están entrenados para ayudarle. Es crucial que busque esta ayuda porque “sin tratamiento hay ciertas condiciones de salud mental que se empeoran y pueden convertirse en incapacidades.”
De acuerdo con NAMI, desórdenes de salud mental comunes en la comunidad latina incluyen el trastorno de ansiedad generalizada, depresión mayor, trastorno de estrés postraumático y el alcoholismo. Adicionalmente, jóvenes latinas en high school tienen niveles más altos de intentos de suicidio.
Si usted no tiene idea como informarse sobre la salud mental o como buscar esta ayuda, su doctor es un lugar bueno para comenzar. Ellos pueden referirle a un proveedor de salud mental, incluso los doctores también tienen conocimiento en este tema. No solo tratan con problemas físicos. Si usted no tiene médico porque no cuenta con aseguranza médica, busque información en su centro comunitario más cercano. Si es estudiante lo más seguro es que cuente con algún tipo de profesional de salud mental en su escuela. También hay que usar el internet para informarnos ya que hay muchos sitios que cuentan con información legítima.
Hay muchos sitios que puede visitar para aprender más información. Algunos sitios útiles son los siguientes:
Este sitio es el de la Alianza Nacional de Enfermedad Mental, y al visitar este sitio puede encontrarse con mucha información incluyendo números de teléfono que puede marcar en momentos de crisis, o simplemente números que puede marcar para obtener aún más información. El sitio también cuenta con artículos que puede leer.
Este sitio es del Departamento de Salud y Servicios Humanos de Estados Unidos, y le puede ayudar con recursos en español, información sobre diferentes trastornos y enfermedades mentales y noticias pertinentes a la salud mental.
En este sitio puede hallar información sobre ayuda en su área.