Es un logro increíble cuando los hijos salen del nido para obtener una educación de nivel universitario después de la escuela superior. No hay un momento más orgulloso para los padres hispanos que cuando sus hijos inician este camino tan emocionante. Aunque sean muchos los obstáculos que los hispanos tengan que superar para adquirir su educación a un nivel avanzado, se han beneficiado de un crecimiento y mejora propia significativos.
Hace 20 años, el 35 porciento de los hispanos en los Estados Unidos completaban la escuela superior sin obtener una educación de nivel universitario. Ahora, el número es solamente un 12 por ciento. Pero a pesar que el porcentaje se redujo a una tercera parte de la cantidad original, los hispanos todavía están en desventaja a otros grupos étnicos para lograr una licenciatura.
Sin embargo, los hispanos consideran que las licenciaturas son muy valiosas. Casi 83 por ciento de los hispanos piensan que las preguntas sobre la educación son unas de las más importantes para ellos para las elecciones presidenciales del 2016.
Si las preguntas sobre la educación son muy valiosas para los hispanos, entonces ¿porque hay tantos desertores escolares? Sesenta y seis porciento de estos desertores dicen que dejan la escuela para apoyar las finanzas familiares. Al contrario, solamente 39 porciento de los desertores escolares blancos dejan la escuela por esta razón. Además, con los precios de las matrículas de las universidades en los Estados Unidos subiendo más altas cada año, es más difícil obtener una educación después de la escuela superior.
Aunque estas razones solamente explican una fracción de los obstáculos de los hispanos, no son la minoría con más baja representación en las universidades. Recientemente, superaron a los americanos africanos, y las matrículas de los hispanos siguen aumentando. A pesar de esto, la mitad de los hispanos en la universidad asisten a programas de educación de dos años porque cuestan menos y es menos compromiso de tiempo también. Las universidades de cuatro años y los distritos de las escuelas públicas tienen que hacer unos esfuerzos más grandes para alentar a los hispanos a lograr una licenciatura de cuatro años. Con este tipo de educación, las oportunidades de trabajo aumentan significativamente y los hispanos pueden obtener éxito en la vida y apoyar la familia más fácilmente. Sacrificios que hacemos para obtener la educación universitaria conllevan la recompensa que tendremos que hacer menos sacrificios más tarde en nuestras vidas.